La nueva versión cuenta con la participación de Jessi Uribe, Pipe Bueno y Luis Alfonso
Parece que la situación entre Ciro Quiñonez y Giovanny Ayala se ha vuelto bastante tensa debido a esta nueva versión de "Regalada sales cara" y las decisiones de colaboración asociadas. Cada uno tiene su propia versión de los hechos y sus propias motivaciones, lo que puede complicar la resolución de este conflicto.
Por un lado, Ayala se siente decepcionado y considera que no se le ha dado el reconocimiento adecuado por su colaboración inicial en la canción. Además, parece que quería asegurarse de que su hijo Sebastián tuviera la oportunidad de participar en el proyecto, lo cual es comprensible desde la perspectiva de un padre que quiere apoyar la carrera de su hijo en la música.
Por otro lado, Quiñonez afirma que planificó el remix durante meses y que Ayala no mostró un gran interés en participar. También menciona que Ayala puso como requisito obligatorio la participación de su hijo Sebastián, lo cual podría haber complicado las negociaciones y la toma de decisiones.
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